En este siglo de siglas, que decía Salinas, las letras cobran vida propia (gracias, Elisa); tanta vida que nos acompañan hasta la muerte, como demostró Dámaso Alonso en su poema en el que las letras ya hacen historia:
LA INVASIÓN DE LAS SIGLAS
(POEMILLA MUY INCOMPLETO)
(POEMILLA MUY INCOMPLETO)
A la memoria de Pedro Salinas, a quien
en 1948 oí por primera vez la troquelación
«siglo de siglas».
en 1948 oí por primera vez la troquelación
«siglo de siglas».
USA, URSS.
USA, URSS, OAS, UNESCO:
ONU, ONU, ONU
TWA, BEA, K.L.M., BOAC
¡RENFE, RENFE, RENFE!
FULASA, CARASA, RULASA,
CAMPSA, CUMPSA, KIMPSA;
FETASA, FITUSA, CARUSA,
¡RENFE, RENFE, RENFE!
¡S.O.S., S.O.S., S.O.S.,
¡S.O.S., S.O.S., S.O.S.!
Vosotros erais suaves formas:
INRI, de procedencia venerable,
S.P.Q.R., de nuestra nobleza heredada.
Vosotros nunca fuisteis invasión.
Hable
al ritmo de las viejas normas
mi corazón,
porque este gris ejército esquelético
siempre avanza
(PETANZA, KUTANZA, FUTRANZA);
frenético
con férreos garfios (TRACA, TRUCA, TROCA)
me oprime,
me sofoca,
(siempre inventando, el maldito, para que yo rime:
ARAMA, URUMA, ALIME,
KINDO, KONDA, KUNDE).
Su gélida risa amarilla
brilla
sombría, inédita, marciana.
Quiero gritar y la palabra se me hunde
en la pesadilla
de la mañana.
Legión de monstruos que me agobia,
fríos andamiajes en tropel:
yo querría decir madre, amores, novia;
querría decir vino, pan, queso, miel.
¡Qué ansia de gritar
muero, amor, amar!
Y siempre avanza:
USA, URSS, OAS, UNESCO,
KAMPSA, KUMPSA, KIMPSA,
PETANZA, KUTANZA, FUTRANZA...
¡S.O.S., S.O.S., S.O.S.!
Oh, Dios, dime,
¿hasta que yo cese,
de esta balumba
que me oprime,
no descansaré?
¡Oh dulce tumba:
una cruz y un R.I.P.!
Esto sí que es una edición corregida y aumentada, sobre todo aumentada. Hacía tamto tiempo que no leía este poema que se me había olvidado que existía.
ResponderEliminarLo que no quiere decir que sea mejorada.
ResponderEliminarCuando vi la presentación me acordé del poema y no me pude resistir. Me acordé también de otro texto pero no fui capaz de encontrarlo.